La empresa estadounidense Wisk, lanzada por Boeing y cofundadora de Google, se muda a Montreal para continuar con el desarrollo de su taxi aéreo autónomo completamente eléctrico.
Detrás de la ingeniería de estos autos dignos del futuro está Sébastien Vigneron, ex Bombardier y ahora vicepresidente senior de ingeniería y programas en Wisk. Este taxi volador es una especie de clon entre el avión y el dron gigante. Este avión no tripulado realiza un despegue y aterrizaje vertical.
“Nuestro objetivo es abordar la congestión urbana y la contaminación del aire. El concepto viene del avión. Lo fusionamos con el de un helicóptero, para poder volar en la ciudad y aterrizar en casi cualquier lugar. Ya tenemos cinco versiones de estos aviones. Ya hemos completado 1600 vuelos en California.” El Sr. Vigneron señala que no surgieron problemas durante estas pruebas de vuelo. Para la empresa, Montreal es muy atractiva, particularmente por sus trabajadores especializados en aeronáutica.