Un pastor canadiense arrestado a principios de año en Corea del Norte acusado de subversión fue condenado a cadena perpetua.
Hyeon Soo Lim, nacido en Corea del Sur y que ejercía de pastor en Toronto de la Iglesia Presbiteriana Coreana de la Luz, fue condenado por el tribunal supremo tras un breve juicio, indicó Xinhua desde Pyongyang, la capital de Corea del Norte.
El tribunal halló culpable a Lim de unirse a Estados Unidos y Corea del Sur para fomentar informaciones y propaganda contra Corea del Norte. También estaba acusado de financiar y ayudar a los desertores que quieren abandonar el país.
Según el tribunal supremo, Lim confesó sus crímenes y mostró su “profundo arrepentimiento”, indicó Xinhua.
Lim fue detenido por las autoridades norcoreanas en enero tras llegar desde China. Según su iglesia en Toronto, estaba en el país en misión humanitaria y ya lo había visitado en varias ocasiones para trabajar en orfanatos y residencias de ancianos.
En agosto, Corea del Norte publicó un vídeo en el que se veía a Lim en una misa en la iglesia Pongsu de Pyongyang confesando sus crímenes ante una pequeña congregación en la que también había extranjeros. “Cometí el peor crimen de todos, insultar y difamar la dignidad y el liderato de la república”, decía Lim en el vídeo.
Consternación canadiense
Canadá se declaró “consternada” tras la condena del pastor canadiense Hyeon Soo Lim a una pena de cadena perpetua con trabajos forzados en Corea del Norte.
“Canadá está consternada por la excesivamente dura sentencia proferida contra el señor Lim por un tribunal de Corea del Norte, particularmente considerando su edad y su frágil salud”, señaló un portavoz de la cancillería canadiense en un comunicado.