El verglás es un fenómeno climático que afecta a Canadá cada invierno, especialmente en las regiones de Quebec y Ontario. Consiste en una capa de hielo que se forma en las superficies debido a la lluvia que cae sobre temperaturas bajo cero, lo que hace que las carreteras, aceras y árboles se cubran de hielo resbaladizo.
El verglás puede ser peligroso y causar accidentes de tráfico y peatones, así como interrupciones en el suministro de energía eléctrica y agua potable. En 1998, una tormenta de verglas en Quebec dejó sin electricidad a más de tres millones de personas durante varias semanas.
Los gobiernos y las empresas canadienses han tomado medidas para minimizar los efectos del verglas, como la salación de las carreteras y la poda de árboles para reducir el peso del hielo. También se han desarrollado tecnologías para predecir y monitorear el verglas, permitiendo una mejor planificación y respuesta.
A pesar de los desafíos que presenta el verglas, también tiene un lado hermoso. Las ramas de los árboles cubiertas de hielo crean paisajes impresionantes y cristalinos que son una maravilla para los ojos. Los deportes de invierno, como el patinaje sobre hielo y el hockey, se benefician del hielo natural que se forma durante un episodio de verglas.
En resumen, el verglas es un fenómeno climático común en Canadá que puede ser peligroso, pero también tiene su encanto. Los canadienses han desarrollado formas de lidiar con él y encontrar belleza en medio de la adversidad invernal.