No falta nada en esta fiesta infantil. Todo es bucólico, alegre, brillante. Hasta los niños: rubios, preciosos, sin una sola mancha. Los globos, las pompas de jabón y las sonrisas están por todas partes. Entonces ¿qué pasa? ¿Por qué dan tantas ganas de llorar?
Los duques de Cambridge, Guillermo y Catalina, han querido agradecer a todos los canadienses su acogida en la ruta de ocho días que han hecho por el oeste del país. Una ruta en la que también han estado presentes sus hijos, los pequeños Jorge y Carlota. Como ellos se han convertido en el centro de atención —¿qué niño no lo es hoy en día?—, los duques les han puesto en el centro de su agradecimiento. Así, desdela cuenta oficial del palacio de Kensington, residencia de los príncipes, han realizado un vídeo en el que se ve a Jorge y Carlota en la fiesta infantil que hicieron en su honordurante la visita.
Sin embargo, el vídeo es raro. Rarísimo. Echa un vistazo tú mismo para ver de qué hablamos.
We have created such happy memories for our children during this visit #RoyalVisitCanada pic.twitter.com/S1v0XO3WvT
— Kensington Palace (@KensingtonRoyal) 1 de octubre de 2016
Efectivamente: las imágenes dan angustia, un poco de grima, resultan escalofriantes. ¿Por qué esa música, como si doblaran las campanas por alguien? ¿Cuál es la intención de que las imágenes aparezcan a cámara lenta?
No es de extrañar que muchos hayan comentado lo desagradable que resulta el vídeo. ¿Qué te parece?
Fuente: El Huffington Post