Lockheed Martin estaría dispuesto a recurrir a medidas económicas punitivas si Canadá se niega a adquirir sus avanzados pero problemáticos cazabombarderos F-35, informa Defence News.
“No quiero que se perciba como una amenaza, pero vamos a tener otra opción: si Canadá se aleja del F-35 [proyecto en el que participa], los trabajos [contratos] en Canadá serán transferidos a otras naciones que sí los compran [a los aviones]”, declaró Steve Over, director internacional del proyecto del F-35 de Lockheed Martin a la ‘Canadian Broadcasting Corporation’.
Justin Trudeau, primer ministro y líder del Partido Liberal llegó al poder en otoño del año pasado, cuando se comprometió a no adquirir el F-35, una aeronave que según él es innecesaria para Canadá, además de demasiado costosa. En medio de debates en el Parlamento sobre la potencial compra de aeronaves F/A-18E Super Hornet, fabricadas por Boeing, Trudeau afirmó en junio pasado que los F-35 “no son operativos y están lejos de serlo”.