El pasado enero, René Angelil, el marido de Céline Dion, murió a causa de una larga lucha contra el cáncer. Al ser uno de los productores más importantes de Canadá, el fallecido tuvo un funeral por todo lo alto en la Basílica de Notre-Dame de Montreal, pero lejos de lo que se esperaba, el precio se ha excedido ‘un pelín’. Así, Céline ha decidido desentenderse de la desorbitada cifra y dejar el pago en manos del gobierno de Quebec.
El pasado mes de enero, el marido de Céline Dion falleció tras una larga lucha contra el cáncer. René Angelil tuvo un funeral por todo lo alto en la Basílica de Notre-Dame en Montreal, pero al parecer el evento se pasó de presupuesto y ahora la cantante ha decidido que es el Estado quien tiene que hacerse cargo del pago.
El gobierno de Quebec se comprometió a pagar la cantidad que costara el entierro, pero tenían en mente gastarse alrededor de 70.000 dólares, y no esta cifra multiplicada por diez, es decir, 700.000 dólares, que es lo que en realidad ha costado el tributo.
Así, según explica la revista Lecturas, Céline se ha desentendido de pagar esta desorbitada cantidad y lo quiere dejar todo en manos del gobierno. La cantante ha sido muy criticada en el país por su decisión, aunque parece ser que no está dispuesta a cambiar de opinión.
Fuente: Antena3
